María Grande al Día

Durante una seguidilla de días, dotaciones de la Brigada Paraná, Paraná Campaña y Comisaria Viale, protagonizaron una minuciosa búsqueda de animales, que culminó este martes, con resultado satisfactorio para el productor ganadero.

El pasado miércoles 20, un hombre de 74 años de edad, radicado en Viale y propietario de una decena de hectáreas sobre la Ruta Nº 18, a la altura del Km. 50, denunció la faltante de 9 vacunos. Se trataba de 7 vaquillonas y 2 terneros, pelaje varios, pampas negras, pampa colorada, y negros, los cuales no portaban marcas ni caravana, pero había advertido que ya no se encontraban en su campo.

Tomó intervención la repartición especializada de la Dirección Prevención Delitos Rurales y efectivos de la Jefatura departamental, llegando hasta el inmueble rural en cuestión y corroborando que los cercos perimetrales se encontraban en óptimas condiciones y no habiendo indicios de flujo de semovientes hacia el exterior, ni huella de algún transporte, que se suelen utilizar para el traslado de animales.
Asimismo, el sábado se mantuvieron entrevistas con el denunciante, arrendatarios, vecinos y se practicaron diferentes diligencias sumariales sobre el terreno pantanoso, como así también averigüaciones y sondeos, a fin de poder orientar la investigación.

Abocados al esclarecimiento, el personal policial puso en marcha este domingo un rastrillaje y seguimiento de pisadas, aplastamiento de malezas y seguimiento de las eses, que fueron detectadas en las inmediaciones próximas al campo del denunciante. Pudiendo visualizarse marcas que se corresponden a vacunos y a personas, tomando sustento la probabilidad de que hayan sido arreados hacia otra finca o lugar de guarda.

Durante dos jornadas completas, se atravesaron zonas de montes, arroyos, chacras sembradas con soja y sorgo, cañadones y demás escenarios de la ruralidad de Paraná Campaña, con resultados infructuosos. Recién este martes, cuando la búsqueda alcanzaba poco más de 4 kilómetros desde su punto inicial, brigadistas sobrepasaron unos zanjones y hallaron a la totalidad de los vacunos buscados. Se encontraban entre la espesa vegetación, lo cual impedía verlos desde lejos, quedando pendiente de determinar en el legajo penal si habían sido semi-ocultos con la finalidad de aguardar el momento específico, dejar pasar los días y que se dieran por perdidos, para luego, cargarlos y trasladarlos del lugar con otros fines.

El lote de animales denunciados como sustraídos, fue arreado hasta la finca del propietario, donde uniformados previa autorización judicial le restituyeron al productor sus vaquillonas y terneros, previa intervención médico veterinaria.