“Apoyamos la necesidad de que las industrias puedan continuar con su operatividad”, afirmó Bahilloy acotó que “es por esto que reafirmamos los procedimientos necesarios para que cada establecimiento aplique de manera estricta los protocolos, en coordinación con las autoridades que conforman los Comités de Emergencia municipales y de esta forma evalúen las formalidades en cada caso puntual”.
Del encuentro, participaron representantes de la Comisión Directiva de la UIER, además del director General del Instituto de Control de Alimentación y Bromatología (ICAB), Pablo Basso; el coordinador General de Gestión del Ministerio de Producción, Ricardo Armocida; el secretario de Industria, Fernando Caviglia, y el director de Industria, Cristian Kaehler.
Leandro Garciandía, presidente de la UIER, rescató el trabajo aunado entre el sector público y privado para enfrentar la pandemia, “atendiendo que tuvimos experiencias en algunas industrias, queremos trabajar en conjunto y establecer cuáles tienen que ser los protocolos, los procedimientos, los caminos que tenemos que seguir, de manera que ante una situación prácticamente inevitable -que el Covid aparezca en una industria como otra parte de la sociedad-, estemos bien preparados, de manera que reaccionemos rápido, implementemos correctamente los protocolos y evitemos que los contagios avancen. De esa manera tendremos el menor impacto en la cadena productiva”, acotó el titular de la entidad industrial.
Ricardo Armocida planteó “si no se cumplen las medidas, la gente se enferma y la planta no funciona. Por eso, como queremos ser preventivos, planteamos trabajar sobre esta situación en concreto y cómo hacer para convivir, producir y comercializar con esta pandemia”. Al respecto, subrayó que “el protocolo es una herramienta de actuar en la contingencia; lo que hace es la hoja de ruta de cómo hacer ante un caso. Y ese es un trabajo de coordinación entre las empresas, los trabajadores y los distintos componentes del Estado”.
Protocolos
El titular ICAB, Pablo Basso, explicó sobre el rol preventivo de los protocolos y resaltó que se activan justamente “para evitar que, si sucede un caso, no se prolongue o sume otros casos más dentro de las plantas”. Asimismo, planteó que “en la mayoría de las industrias, no se suceden casos dentro de los trabajos, sino que vienen desde afuera hacia adentro y difícilmente se multipliquen dentro de las empresas. Incluso, dentro de las empresas de alimentos hay una cuestión favorecedora, que tiene que ver con que ya se aplican otros protocolos por la inocuidad que hacen que se sumen a los nuevos de desinfección y distanciamiento”.
Por otra parte, Basso explicó sobre la importancia del contacto con las autoridades sanitarias municipales, para hacerles llegar los protocolos preventivos, de modo tal que sean puestos a consideración y sujetos a posibles auditorías si resultara necesario. “De este modo, se evitan problemas de cierres definitivos de las plantas, atendiendo justamente al rol que cumplen estos procedimientos de actuación preventivos”. El funcionario insistió en que esto es fundamental sobre todo en los pueblos más chicos de Entre Ríos, donde las empresas son importantes para las comunidades.
En este sentido, consideró clave que las industrias adapten a su realidad los procedimientos y que se realicen con responsabilidad, según el tipo de actividad. “El protocolo tiene que ser serio, tiene que estar bien implementado, acorde a las circunstancias de cada establecimiento y con la posibilidad de cada uno”, resaltó. “Para estos casos hay que ser muy estrictos, para proteger las empresas”, acotó el titular del ICAB.
Basso señaló que es clave el trabajo con los COEs locales y la unificación de criterios, por lo cual avanzan desde el Ministerio de Producción y Salud en brindar a los municipios las “herramientas para que evalúan las actividades habilitadas y a partir de ahí decidir qué hacer, cómo mejorar, además de evaluar los protocolos”. “Hay que ser estrictos con los protocolos”, finalizó el funcionario provincial.