María Grande al Día

La pregunta que públicamente queremos hacerles a los funcionarios del área de educación del gobierno de Rogelio Frigerio es si no les da vergüenza, en el contexto en el que estamos, enviar circulares políticas a los equipos directivos de las instituciones educativas pidiendo marcar en el sistema sage a las y los docentes que adhieren a la medida de fuerza. Lo bochornoso e impresentable de esta especulación política no es sólo su ilegalidad y su inmoralidad, si no que lo hacen en el mismo momento en que el gobernador Frigerio, de gira en Alemania, habla del “futuro del federalismo” con dirigentes germanos del Estado federado de Hesse. El gobierno de Entre Ríos dice que SI a todos los ataques políticos que el gobierno de Milei viene llevando adelante contra los derechos populares, con un grado de ajuste brutal, de centralismo y unitarismo que pocas veces se ha visto en la historia argentina y nos habla después de su “preocupación por el futuro federal”.

O su grado de cinismo ha llegado a grados impensados o deberían iniciar alguna terapia para volver a reconocer el principio de realidad. Hay provincias como Salta que recurren a la Corte Suprema para defender el Fondo de Incentivo Docente y hay provincias como la Entre Ríos actual que se vuelve colaboracionista del gobierno nacional, que transforma en nada las reuniones paritarias sin hacer propuesta de recomposición salarial y que además, pide lista de adherentes a la huelga. En Alemania no piden lista de paro y no persiguen a los que luchan. No tenemos claro que Alemania miran o admiran, porque en todo caso, la Alemania que perseguía a la gente era la Alemania de Goebbels. En la Alemania federal actual hay leyes duras contra todo tipo de negacionismo, racismo y discriminación. El gobernador podría pedir copias, leerlas y compartirlas con sus funcionarios y con el presidente Milei.

El botón “informar huelga” del Sage es ilegal. El derecho a huelga está en nuestra Constitución. Debemos obviar y enfrentar legalmente esa trampa digital que lo único que busca es descontar y robar parte de los magros sueldos de las y los docentes que desarrollan una lucha para todos. Los funcionarios del gobierno deben abstenerse de pedirle a los equipos directivos de realizar una acción ilegal e inmoral. Si ésta era la república que decían defender hace un tiempo, la verdad es que es una república muy poco republicana y muy poco democrática. Las y los trabajadores docentes, y el pueblo trabajador quieren una política que defienda sus derechos sin versos ni doble discursos. Los que trabajamos queremos que nuestro trabajo y nuestro sueldo tengan valor, un valor parecido al que el presidente de la Nación y los legisladores nacionales consiguieron con el aumento que se dieron en estos días, mientras decían públicamente que “no había plata”.

Mauricio Castaldo
Delegado gremial e integrante del Equipo de Formación de Agmer Filial María Grande