María Grande al Día

Dentro de los proyectos que el acuerdo plantea de urgente tratamiento se destaca la necesidad de debatir en torno a la posibilidad de reformar la Ley Nº 24.065, de Régimen de la Energía Eléctrica, “para ponerla a disposición de las nuevas realidades que necesita el pueblo y no de las empresas privatizadas”. Por otro lado, que se haga efectiva la participación de lxs trabajadorxs organizadxs “en el control de la producción de energía y colaboración en la dirección de las hidroeléctricas binacionales, tal cual lo ordena el artículo 14 bis de la Constitución Nacional”. Mientras que el tercero de los diez puntos plantea “instar a que desde las Hidroeléctricas Binacionales se genere un desarrollo en la región que mejore la calidad y cantidad de trabajo de vastos sectores de la sociedad”, entre otras propuestas detalladas en el documento adjunto.

“Con este convenio se abre la posibilidad de que dos importantes sindicatos pertenecientes a nuestra Central, que son parte de la FeTIA, puedan articular iniciativas comunes, puedan generar propuestas para tratar de lograr que un cuadro absolutamente caotizado, que tiene que ver con la generación de energía limpia, barata y accesible a la población, pueda gestarse a partir de la participación de los trabajadores”, expresó nuestro secretario general de la CTA y diputado nacional, Hugo Yasky. Al mismo tiempo subrayó la necesidad de “mejorar las condiciones de vida de los trabajadores, amplificar la posibilidad de generación de energía, mejorar la matriz energética y a la vez tener la posibilidad de que la participación del sector sindical sea clave en la gestación del proyecto estratégico”.

En tanto, el secretario general de la FeTIA y presidente del Astillero Río Santiago, Pedro Wasiejko, señaló: “Es un paso trascendental entre el vínculo de los sindicatos adheridos a la FeTIA y a la Central de Trabajadoras y Trabajadores, con el Sindicato de A.P.A.Y. y el Sindicato de SIATRASAG de Salto Grande, de las represas hidroeléctricas más importantes de nuestro país. Se han trabajado varios puntos en común, todo vinculado con la problemática hidroeléctrica, con los proyectos que hay que impulsar desde estas empresas hidroeléctricas, que pueden jugar un papel muy importante en la reconversión de la matriz energética en nuestro país. Debemos discutir que el modelo de Menem y Cavallo tienen que terminar de una vez en la matriz energética, fundamentalmente respecto al tema eléctrico”. Y fundamentó: “No podemos seguir pagando la energía eléctrica 80 dólares el mega, cuando desde una central hidroeléctrica se puede estar produciendo con mucha competitividad y mucha eficiencia. Si se le pagara a una hidroeléctrica 20 dólares el mega estaría en condiciones de pagar su mano de obra, mantenimiento, realizar inversiones y acompañar un proceso de construir otras represas que son necesarias para el país”.

Respecto a la importancia de este convenio para lxs trabajadorxs del sector, Wasiejko definió: “Los trabajadores son fundamentalmente los interesados en crear un modelo con trabajos que son de calidad. Nuestros compañeros tienen convenio colectivo, tienen salarios interesantes, con derechos, y de alguna forma, para seguir jugando ese papel en la zona donde están se necesita la participación de los trabajadores en el directorio de estas empresas. Porque la voz de los trabajadores hace que estos proyectos no tengan discontinuidad con los avatares de la política”.

“De alguna manera es una mirada estratégica permanente, que tenga en cuenta los intereses de los trabajadores, pero fundamentalmente tenga en cuenta el interés nacional; el papel que juegan las energías renovables; el papel que pueden jugar estas hidroeléctricas en la construcción de otras represas o emprender también el camino de la mejora de las cuestiones ambientales y generar energía limpia”, detalló Wasiejko, y agregó: “Hace muy poco Lula lo está anunciado con Itaipú. Estas hidroeléctricas podrían estar generando en las turbinas que no están entregando energía en la red, que no están exportando. Se podría utilizar esa capacidad ociosa que hoy llega al 60% para generar hidrógeno, y después esas energías limpias se podrían utilizar en otras necesidades”.

El secretario general del Sindicato Argentino de Trabajadores de Salto Grande (SIATRASAG), Sergio Benítez, remarcó: “Salto Grande y Yacyretá son fundamentales para llevar adelante ese desarrollo y crecimiento. Tienen mucho potencial, la energía es renovable. Muchas cosas se pueden desarrollar a partir de los complejos, y como trabajadores creemos que debemos tener un papel preponderante en ese desarrollo”.

Respecto a los beneficios para los trabajadores, afirmó que “se respetaría lo que está en nuestra Constitución, como lo es la participación de los trabajadores en el directorio de las empresas. Pedimos que se cambien algunas leyes. Que se ponga sobre la mesa la ley 24.065, que se discuta, ya que es la que regula el sistema eléctrico de la Argentina, porque la energía tiene que estar a disposición de los trabajadores y no, como quieren hacer desde la derecha, poner a los trabajadores a disposición de la energía”. El titular del gremio de Salto Grande, también se refirió a la necesidad de la “vuelta a la órbita nacional de las centrales del Sur; proteger al sistema eléctrico como algo nacional, ya que hay provincias que están tratando de llevarlas para el lado provincial. La planificación del crecimiento del sistema eléctrico debe estar centralizado en el Estado Nacional, porque es el único que tiene el recurso para desarrollarlo”.

Tal como lo plantean en el convenio, luego de 30 años de vigencia, a mediados de este año vencen los contratos de concesión de explotación de las centrales hidroeléctricas de propiedad del Estado Nacional (Agua y Energía Eléctrica e Hidronor). “Hay un proyecto del senador (Oscar) Parrilli para que vuelvan al Estado Nacional. Volver a lo que era Agua y Energía. Nosotros estamos apoyando ese proyecto para que se impulse la terminación de las centrales que están en construcción que son la Néstor Kirchner y la Zepernick, y algunos proyectos que han quedado en carpeta”, señaló.

“La energía hidroeléctrica es renovable. Requiere de una inversión importante al principio, pero luego es una ganancia total para el Estado y además no contamina. Hoy, gracias a eso, cambiando algunas leyes, si se desarrolla un mercado de hidrógeno verde en las centrales hidroeléctricas, se puede producir”, puntualizó Benítez. Por último, también se refirió al diálogo con los países hermanos: “En Uruguay nosotros tenemos comunicación muy cercana con el gremio uruguayo. Formamos una mesa coordinadora dentro de la central. Estos temas se han hablado y hay un interés muy grande respecto al desarrollo del hidrógeno. Queremos, a través de esta mesa, juntarnos con los gremios paraguayos, brasileños, uruguayos. Que se hagan encuentros, que sea la CTA la base de esos encuentros para que los trabajadores de todo el Mercosur, pertenecientes a la parte hidroeléctrica, estemos en la misma sintonía”.

En tanto, el secretario general de la Asociación del Personal Argentino de Yacyretá (A.P.A.Y.), José Correa, destacó: “Esto va a significar darle una vuelta más de lo que podemos hacer a nivel nacional. Hoy estamos trabajando de manera regional y queremos hacer esto a nivel nacional y que verdaderamente los trabajadores organizados puedan tener una voz y puedan expresarse en otros medios como es Buenos Aires, para todos los proyectos que hay previstos, que se están trabajando en este momento. Hay mucho para hacer desde el interior hacia la Capital”.

“El desarrollo regional es muy importante. Hay sectores en el interior que necesitan un mayor auge, para resolver cuestiones de falta de trabajo, y especialmente la tecnología, que está relegada en este momento. Todos esos proyectos que redundan en favorecer a la tecnología, favorecer un desarrollo tecnológico, van a ser muy importante desde Yacyretá y Salto Grande”, resaltó Correa y agregó: “No podemos olvidar que nosotros somos una fuente de energía limpia, saludable, renovable y creo es muy amigable con el medio ambiente, con las personas. Las dos centrales Yacyretá y Salto Grande, que forman la base piramidal de la energía promueven esto, un mayor contacto, sin el problema que podría tener otro tipo de centrales que producen energía, que por ejemplo queman combustible. Esa es la diferencia”.

Estuvieron presentes, también, Sebastián Berthet, secretario general adjunto de SIATRASAG; Juan Francisco Soto, secretario general de la Regional CABA de FeTIA y referente de A.P.A.Y.; Juan Alberto Romero, secretario de la Comisión Directiva Central de A.P.A.Y.; y por la Comisión seccional Buenos Aires de A.P.A.Y., su presidenta Silvia Rodríguez, y lxs delegadxs Marcela González, Juana Sierra y Martín Masio. Por la CTA, Eduardo Pereyra, secretario de Organización, y Enrique Rositto, secretario de Comunicación.