María Grande al Día

Al abrir la jornada, el titular de la cartera educativa, Martín Muller señaló la importancia de “no solamente de cumplir con el deber de la ley que fue sancionada por la Legislatura de la provincia, sino también poder incorporar la perspectiva de género al criterio de las políticas públicas y a nuestras prácticas cotidianas”.

“Queremos no solamente trabajar desde lo discursivo y desde la acción correcta que hacemos en las escuelas con la implementación de la ESI, sino también como funcionarios públicos tratar de apropiarnos de esta perspectiva de género. Necesitamos estas instancias de reflexión y de compartir conocimientos”, precisó.

En ese sentido, el funcionario aseveró que “siempre hay algo más que aprender para poder construir una sociedad que sea más justa, más igualitaria, una sociedad libre de violencias. Y por eso la necesidad de la capacitación continua, la necesidad de la participación”.

Asimismo, la vocal Griselda Di Lello precisó. “Está estipulada esta capacitación de carácter obligatorio para todos aquellos que estén en la función pública y que seamos agentes responsables del Estado. En consonancia con esto que detallo, se planificó en la gestión del presidente Martín Müller esta instancia para todos y todas los miembros y agentes del Consejo General de Educación”.

“En perspectiva con la diversidad de género, con el tema de violencia; esto permite ir sensibilizando y visibilizando estas cuestiones que, muchas veces, la práctica cotidiana y el quehacer de todos los días no nos permite detener nuestra marcha y ver qué estamos haciendo, cómo lo estamos haciendo, qué responsabilidad tenemos sobre estos hechos, qué podemos hacer desde nuestros lugares como funcionarios del Estado”, subrayó.

En fin, “nos lleva a un entramado de temas que hacen a la integralidad del sujeto y creo que, siendo el CGE es más que pertinente haber abordado este tema, desarrollar estas instancias de encuentro donde circule la palabra, las diferentes voces, los pensares y los sentires que nos lleven a buscar un lugar de trabajo ameno donde mi derecho termina donde comienza el derecho del otro, donde nos respetemos todos y podamos construir así una educación mejor”, destacó Di Lello.