María Grande al Día

El miercoles de la semana próxima, desde las 10.30 hs. se llevará a cabo en el Senado de la Provincia, la entrevista final que es el paso previo que tiene la Cámara Alta para poder dar aprobación al pliego presentado por el Gobernador Gustavo Bordet, nombrando al Dr. Diego Lucio Lara, como Presidente del Tribunal de Cuentas de la Provincia.
Este proceso de designación a través de un concurso, se lleva a cabo por primera vez desde la creación del organismo de control de las cuentas públicas en la década del 70. De esta compulsa participaron 14 personas; todos profesionales del Derecho o de la Ciencias Económicas, que era uno de los requisitos establecidos, quienes debieron presentarse ante un jurado creado especialmente a fin de elaborar la terna que le fue presentada al Gobernador.
Esta surgió de acuerdo al puntaje obtenido por cada uno de los concursantes, en la que Lara quedó en primer lugar, secundado por el actual Presidente interino del TC Dr. Federico Tomas, completando la terna la Dra. Nanci Vinagre, al momento asesora Jurídica del organismo. De allí Bordet, con la discrecionalidad que le otorga al Gobernador la Ley, propone al postulante mejor ubicado en la terna, lo que ahora requiere el acuerdo del Senado.
De concretarse la designación del actual Diputado Provincial como Presidente del TC, esto significa que deberá renunciar a su banca como Legislador, al ser incompatible ambas actividades. Lo mismo ocurre con el ejercicio de su actividad profesional de abogado, y la actividad política.
Lara estaría asumiendo su nuevo cargo la segunda semana de Diciembre próximo.
Al respecto el ex Intendente de nuestra ciudad hizo referencia al señalar- «Esta fue una decisión de vida. Consideré que después de tantos años en la función pública, siempre por voluntad popular, he adquirido una experiencia que puedo volcarla en una responsabilidad que es totalmente distinta. Es un órgano de control externo, que audita la inversión de los fondos públicos de la provincia, entes autárquicos, municipios, comunas. Pero que considero también tiene que contribuir a mejorar las gestiones, colaborando para que nuestros representantes cumplan con todo los procesos que la normativa le indica y hagan la gestión más eficiente. El Tribunal de Cuentas es un organismo que necesita modernizarse. Tambien entiendo que debe incorporarse otra mirada del sector técnico profesional, como ingenieros, analistas de sistemas, especialistas en derecho en medio ambiente».
En otro tramo de la nota expresó «he dado lo mejor de mí en todo este tiempo de militancia en la política. Y querría expresar mi agradecimiento a toda la gente que ha estado todo este tiempo acompañándome. Me voy con la idea que mis convicciones políticas partidarias, a las cuales no desconozco y de las que no voy a renegar nunca, no deben ni van a interferir en esta nueva función, que es la de presidir un órgano de control que es independiente, objetivo, apolítico. Sin dejar de reconocer que todas las personas que ocupamos un rol en el Estado, venimos del mundo de la política. Pero el rol que he ocupado como Intendente de mi ciudad, como legislador o como autoridad partidaria, no puede cuestionarse o ser un disvalor para pasar a ocupar un cargo en un órgano apolítico, como es el caso de tantos protagonistas de las políticas que después derivan en ocupar importantes cargos en la Justicia»