El Sindicato Único de Trabajadores de la Salud de Entre Ríos (Sutser) advirtió sobre situaciones “repudiables y alarmantes” que suceden con trabajadores suplentes en el estado provincial. “Queremos que la sociedad conozca lo que viven a muchos trabajadores de la Salud en la Provincia”, indicó la secretaria General del gremio, Fabiana Arquiel
La situación se profundizó a partir del anuncio del gobierno provincial, sobre fines de diciembre, de pasar a planta permanente al personal contratado y a los suplentes por orden de antigüedad en el cargo, de acuerdo a las vacantes existentes. Se entiende que existe una determinación de desplazar de sus puestos a los suplentes con mayor antiguedad que no cuentan con aval político o gremial, dejando en esos lugares para los amigos o allegados, que podrán eventualmente pasar a planta cuando el gobierno establezca los pases.
“Los trabajadores suplentes padecen intimidaciones y sufren un estado de vulnerabilidad en su derechos, aún aquellos que tienen antiguedades importantes, ya que son victimas de abuso de autoridad y han sido despojados hasta de trabajo por caprichos o por antojos de quienes hacen política gremial y partidaria con los lugares que vienen ocupando”, se señaló desde la entidad gremial que encabeza Fabiana Arquiel.
Dentro de las irregularidades que se remarcan desde el Sutser se mencionan los padecimientos que viven los enfermeros de los hospitales a quienes, con la excusa de una evaluación de su desempeño, sin siquiera haber sido notificados de la misma con la anterioridad que debería hacerse, se los deja sin trabajo. “Dieron de baja a una trabajadora con ocho años de antigüedad con una evaluación carente de sustento dentro de la profesión, donde las mismas deben ser correctivas en el transcurso del tiempo. Esto deja evidencia que hay intenciones subjetivas de parte de los directores de los hospitales”, indicó la titular del Sutser.
“Esa enfermera nunca antes fue evaluada y parece que recién ahora se dan cuenta que pueden evaluarla, y encima de este modo. Los trabajadores no pueden ser evaluados según el estado de animo o necesidad política de algunos”, expresó Arquiel.
Desde el gremio se indicó que se elaboran “expedientes que determinan el mal desempeño de enfermeros, cuando lo que se debería hacer son esfuerzos por parte de la dirección del orientados a que funcionen correctamente las áreas de compras y de entrega de medicación para que los pacientes la tengan en tiempo y forma, evitar así posibles fallas en los efectos de los antibióticos por ejemplo”.
Mientras se produce este reemplazo de suplentes, sacando de los cargos a quienes tienen mayor antiguedad, para reemplazarlos por allegados dirigentes gremiales o políticos -según denuncia el Sutser- también se advierte que en diferentes efectores públicos de Salud se siguen incorporando nuevos Jefes de Enfermería sin el concurso debido “solo por conveniencia y por disposiciones de la Dirección del hospital, pese a que existe una ley en plena vigencia que regula esas situaciones”.
La dirigente gremial señaló que los enfermeros representan “casi el 80% del sistema de salud público” y recordó que en muchos lugares deben hacer enormes esfuerzos para cumplir su tarea por que faltan insumos o deben desempeñarse sin contar con las medidas de bioseguridad que protejan a los trabajadores, lo que resulta indispensable para mejorar su condición laboral.
La conducción del sindicato de Salud Pública apuntó además a las situaciones de violencia física o psicológica que padecen muchos trabajadores de la Enfermería. “En efecto, el personal de Salud es víctima de conductas arbitrarias y en muchos casos desmedidas por parte del personal directivo de los distintos establecimientos, lo cual genera un clima inestable de trabajo y a su vez impide un desempeño adecuado de las delicadas tareas que los trabajadores tienen a su cargo”, remarcó Arquiel. “Los enfermeros son quienes reciben, cuidan y despiden la vida, y trabajan los 365 días del año en sus diferentes tareas, brindado siempre respuesta a la sociedad y esto no es reciproco. Están expuestos incluso a situaciones de violencia generadas por los familiares de los pacientes”, agregó.
A ello se suman situaciones que responden a la falta de gestión de los directores de algunos centros de Salud, por ejemplo situaciones en las que no reemplazan las ausencias generadas por accidentes laborales, argumentando que no pueden solicitar suplentes. “Es necesario contar con el número de enfermeros que requiere la dotación de un sistema de salud específico, contar con el recurso humano indispensable para su funcionamiento, además de considerar las tareas de enfermería que requieren los pacientes según el nivel de prevención y atención”, remarcó Arquiel.
¿Quien designa?
Los cargos jerárquicos de enfermería que se completan por disposición interna representan un tema conflictivo. De acuerdo a quejas de los trabajadores de salud, las designaciones son señaladas por los gremios ATE y UPCN (sindicatos generalistas) junto a algunos directores hospitalarios.
Arquiel indicó que esta metodología -la disposición interna- es incorrecta. “Así se violenta el derecho a la estabilidad y, fundamentalmente se violenta ostensiblemente la Ley Nº 9564 de Enfermería, desconociéndose su antigüedad y su eficiente desempeño en la jefatura de Enfermería. La realidad es que en dicha disposición interna se invocan facultades discrecionales que no pueden ser permitidas en materia de nombramientos y ascensos, para evitar procederes arbitrarios”, enfatizó. “Para la cobertura de tales cargos debe necesariamente llamarse a concurso, no estando previstas las designaciones interinas ni siquiera hasta que se convoque al pertinente concurso”, agregó.
“En el entendimiento de que la señora ministra ha explicitado reiteradamente su apego a los marcos legales vigentes, es que le solicitamos se convoque urgentemente a concurso para los cargos de enfermería que así se requieran”, remarcó la dirigente gremial en referencia a Sonia Velázquez.
La titular de la cartera sanitaria asumió hace ocho meses en reemplazo de Ariel De La Rosa -a quien se le objetaba, entre otras cosas, favorecer a sectores vinculados a UPCN-, y al hacerlo prometió una apertura del ministerio a todos los sectores. Sin embargo, todavía no se ha reunido con el gremio especìfico de Salud. “La salud atraviesa una delicada situación y es el Estado quien debe garantizar el sistema de salud, lo que constituye en un eje central de la política del Estado entrerriano”, indicó finalmente Arquiel.