María Grande al Día

Todas compran la energía a CAMMESA, es decir que parten de los mismos costos iniciales; sus empleados pertenecen al mismo gremio, por lo que los costos laborales son semejantes; el nivel de prestación es más o menos parecido, por lo tanto los costos operativos deberían ser similares  y en todos los casos son empresas monopólicas, consecuentemente no tienen precios promocionales porque no compiten con nadie.

Sin embargo, pese a que todas estas provincias parten desde el mismo costo inicial de $ 1.077 el MWh desde el 01/02/2018 (lo que significa $ 1,07 por kWh)  las diferencias son siderales SIN CONTAR LA CARGA IMPOSITIVA, que es una verdad relativa que usan para justificarse. El mayor porcentaje en el costo de la energía eléctrica que sufre el usuario final está dado por el VAD, que es el Valor Agregado de Distribución que cada empresa le carga al costo de la energía y para resumirlo es COSTO OPERATIVO + RENTABILIDAD .

Si tomamos como ejemplo un consumo bimestral de 1.165 Kw, sin estímulo (es decir que no haya tenido un consumo menor que igual bimestre del año anterior) y SIN IMPUESTOS NI TASAS MUNICIPALES , una familia entrerriana paga $ 3.889,56; una correntina $ 2.152,49; una chaqueña $ 2.267,37 y una misionera $ 2.299,36.

Si a eso le agregamos la carga impositiva y  tasas la diferencia porcentual es aún mayor, llegando a ser un 122,39 % más cara, sin contar algunos  aportes especiales como contribuciones a bomberos que tienen algunas ciudades.

En lugar de cargar las culpas al gobierno nacional, ENERSA debería preguntarle a las empresas de energía de CORRIENTES, MISIONES, CHACO y SANTIAGO DEL ESTERO como se administran para tener un VAD mucho menor y consecuentemente cobrar la energía la mitad de lo que vale en ENTRE RIOS.

La sociedad no necesita más Poncio Pilatos, necesita funcionarios que asuman las responsabilidades que a cada uno les competen.-

Jorge Enrique Lacoste  ( Diputado Nacional )